La famosa marca de lujo Hermès tiene el futuro asegurado casi al 100%. Nicolas Puech, mayor accionista individual de Hermès, según la Tribune de Genève, dejará parte de su fortuna a un empleado suyo de 51 años, identificado como «un antiguo jardinero y personal de mantenimiento de origen marroquí», según informa La Vanguardia a través del medio ginebrano. Se estima que la fortuna es de 9,000 y 10,000 millones de francos suizos.
«En Suiza, adoptar a un adulto no es imposible, pero sí inusual», informa el diario ginebrano, puntualizando que si el proceso tiene éxito, heredaría «al menos la mitad» de su fortuna.
Puech redactó un documento que envió a su abogado donde se detallaba su última voluntad en octubre de 2022, en la que quería poner en orden su sucesión. En el texto también se detallan las instrucciones para que el letrado inicie el trámite pertinente para que se efectúe el proceso. El octogenario, con el fin de querer evitar problemas a futuro, decidió adoptar a su empleado, un proceso, que según el mismo medio, continúa.
Las intenciones de Puech están siendo criticadas y enfrentadas por otros presuntos herederos de su fortuna. En 2011, el octogenario firmó un pacto sucesorio a favor de una fundación con sede en Ginebra llamada Isocrate, la cual financia proyectos que luchan contra la desinformación a través de las ONG que apoyan el periodismo.