La fruta es un alimento indispensable en nuestra dieta por lo saludable que es y los beneficios que tienen para nosotros, incluso aquella que está deshidratada. Aunque no lo parezca tiene beneficios para nuestra salud.
Para empezar, estas contienen mayor concentración de nutrientes, aunque menos agua, como la manzana o el albaricoque. Por otra parte, los frutos rojos o el mango se infunden con una solución azucarada antes de secarse, por lo que si se quiere obtener energía rápidamente son una buena opción.
Aquellas que no contienen azúcares añadidos son una opción para hacer refrigerios saludables. Se puede pensar que al ser más concentrado tiene más azúcar, pero realmente el índice glucémico es de bajo a moderado.
Además, por otro lado, la ingesta de frutos secos tiene enormes beneficios para la salud, como mejorar el perfil lipídico, el apetito, controlar la saciedad, enfermedades cardiovasculares, presión arterial, regulación de glucosa e insulina o salud ósea, entre otros beneficios. Incluso pueden ayudar a aspectos como regular las deposiciones o tener una frecuencia más controlada.