La tendencia habitual cuando varios comensales acuden a un buffet libre es la de arrasar con todo y hasta que el cuerpo diga basta. Debido a las comandas exageradas de muchas personas que pensaban que podrían comérselo todo, cada vez son más los establecimientos que ofrecen este tipo de servicios que han optado por cobrar a parte todos aquellos platos con comida que queden sobre la mesa una vez los comensales hayan terminado de comer. Esto es algo importante a tener en cuenta antes de pedir la comanda.
Un grupo de cinco jóvenes acudió a un buffet libre, de los que hacen pagar los platos que no se hayan comido, con la intención de «arrasar con todo». Pero no fue así. Y es que, una vez sus estómagos dijeron basta, sobre la mesa aún quedaban decenas de platos sin empezar. Por este motivo, el establecimiento del lugar les pasó una cuenta de 181 euros por todos los platos servidos que no llegaron a comerse.
En el programa Aruseros, de la Sexta, explican que estos jóvenes justificaron lo ocurrido, después de compartir el vídeo de lo sucedido en redes sociales, diciendo que en realidad estaban esperando a otro amigo. Aún así, posiblemente habrían sido demasiados platos para una sola persona.