Las aguas de Mona Vale, Sidney, Australia, fueron escenario de una particular escena grabada por una GoPro. En las imágenes se puede ver cuando un veterano windsurfista de 55 años, Jason Breen, es literalmente tumbado por una ballena.
Él mismo comentó en su perfil de Instagram que «mirar cara a cara a este hermoso y majestuoso mamífero fue un encuentro surrealista».
El deportista relató a 9News que la ballena «aterrizó directamente sobre mí y quedó atrapada en mi correa. Probablemente me arrastró unos siete u ocho metros bajo el agua». «Pensé que todo había terminado, entonces sentí que se me rompía la correa y pensé ‘gracias a Dios' y subí a la superficie», explicó mientras concluyó que cree que salvó su vida porque se trata de una cría de gran tamaño de ballena jorobada.