Un emotivo vídeo circula por redes sociales. El día de su boda, Julia decidió pasar un rato junto a su padre, que padece demencia. El señor estaba pintando en el porche mientras su hija, vestida de novia, le animaba a que continuara con su dibujo.
Todo cambió cuando, de repente, el padre se gira y, como de un susto, suelta el pincel y suelta una pequeña exclamación. «¿Cariño? ¿Julia?», expresa entre risas nerviosas por la emoción. Su hija no se lo cree mientras recibe un gran abrazo y un beso. «Estás muy guapa», le comenta el padre.
Julia entonces le dice que «es hoy». «¿Es hoy? ¿La boda?» pregunta su padre. Ambos no dejan de tocarse y abrazarse mientras el señor no cesa en los cumplidos a su «precioso bebé». Está claro que fue el mejor regalo de bodas que podía recibir.