El Consell d’Alcaldes acordó en su última sesión celebrada este viernes impulsar un plan de choque para reducir el volumen total de generación de residuos en la isla de Ibiza. Actualmente, la mayor de las Pitiusas recicla el 42% del total de residuos que se generan, lo que se traduce en 80.000 toneladas anuales de residuos que acaban en el vertedero de Ca na Putxa. Este plan de choque implicará la creación un grupo de trabajo técnico que determinará qué se debe hacer para conseguir disminuir el volumen de generación de residuos. Entre otras medidas, Vicent Marí avanzó que se podría impulsar la creación de ayudas para incentivar la separación en origen y la reducción de residuos, campañas de comunicación para concienciar a la población, nuevos espacios de reciclaje como los puntos limpios o la vigilancia ya sea con medios digitales o la contratación de personal para controlar comportamientos incívicos, entre otras iniciativas. En cuanto a la financiación, ésta vendría de fondos de la ecotasa, igual que ocurrió con el plan de choque de lucha contra el intrusismo.
Prueba piloto.
Este plan de choque se enmarca en la futura prueba piloto de traslado de residuos de Ibiza a Mallorca para que sean incinerados en la planta de Son Reus. De hecho, este próximo martes está previsto que el Parlament convalide el decreto que precisamente dotará de marco jurídico a la prueba piloto del traslado de residuos tras alcanzar PP y Vox un acuerdo para ello.
El futuro.
La vida útil del vertedero de Ca na Putxa se extenderá a no más allá de 2027 o 2030. De ahí la importancia de que no se retrase más la prueba piloto de traslado de residuos para poder sondear si ésta sería la solución más viable o no. Además de buscar una solución al vertedero de Ca na Putxa cuando éste acabe su vida útil es vital que la población tomemos conciencia de la cantidad de residuos que generamos a título individual cada día y que consigamos reducirlos con conciencia social y, sobre todo, medioambiental.