Los recientes aguaceros que cayeron en la ciudad de Eivissa ocasionaron grandes inundaciones, que causaron estragos en el centro y en otros barrios. Se dice y se repite que ha sido por culpa de tres desagües que se habían eliminado (o algo parecido) en la zona portuaria y con ocasión de las obras realizadas en el muelle sur. Ahora harán que los desagües vuelvan a estar en condiciones de evacuar aguas (se supone que pluviales y sin depurar) y todos contentos. Así que solamente cabe esperar que vuelvan las lluvias torrenciales y ver lo que pasa en la ciudad. Lo que más me extraña es que siempre que hay aguaceros en Vila se inundan las calles y las aceras se llenan de toda clase de porquería, y se inundan muchos comercios. Y algo, al parecer, novedoso en sa Riba y la Bomba: aguas pestilentes han salido por los lavados. Y si algo claro hay, es que la red de alcantarillado de la ciudad no trabaja de manera correcta. Pero no es de ahora, sino que desde hace años sucede lo mismo, y todo indica a que en la zona del puerto no funciona bien el sistema de evacuación y que las aguas vuelven para atrás. No sé si es cierto, pero hace algunos años, mientras realizaba el programa Parlem clar en Ràdio Èxit, llamó al estudio un conocido comerciante y me informó de que el aliviadero situado en la esquina que hacen los muelles sur y de poniente, cerca del monumento al pescador, está taponado con plásticos y otros materiales y que las aguas pluviales retroceden y salen por las alcantarillas. No sé si es todo cierto, pero sí está más que claro que el alcantarillado no funciona y que es más que urgente que se construya uno nuevo. Y otra cosa: con la instalación de la nueva depuradora de aguas residuales de sa Coma, por pura necesidad, se deberán mejorar y modificar las redes de pluviales y de aguas residuales. En consecuencia, y visto lo que pasa con las inundaciones, bueno será que ahora planifiquen en serio la nueva situación, de manera que la ciudad de Eivissa, sus habitantes, comerciantes y turistas puedan estar tranquilos en tiempos lluviosos.
Me da la impresión de que el proyecto del Govern balear de cobrar una ecotasa a nuestros visitantes es acertado, y más teniendo en cuenta que la tasa existe en muchos países europeos y también en los Estados Unidos. Claro que se debe cobrar a todos y explicar muy bien a los turoperadores y en las redes sociales en qué se van a invertir los euros recaudados. Si la ecotasa va a parar a las arcas del Govern balear, ya digo que no, que nada de ecotasa (yo no me fío de Palma ni tampoco de Madrid). A mi entender, los euros recaudados se han de ingresar en las cuentas corrientes municipales, en todos los ayuntamientos, y que el dinero sirva para mejorar las calles, en todos los sentidos, y para limpiar de una vez por todas playas, torrentes, bosques, campos, solares (vallados y sin vallar) y eliminar los vertederos clandestinos que cubren nuestra isla.