La confesión de Jaume Matas, expresidente de Baleares e imputado en el caso Nóos, ha puesto contra las cuerdas a Iñaki Urdangarin y todo indica que con el consejo de su equipo de abogados conseguirá reducir la pena de 11 años de cárcel que pide el fiscal. Matas admitió en sus manifestaciones del pasado jueves que sabía que Undargarin era el que pedía la comisión, para llevar a cabo el proyecto (del equipo ciclista); con una comisión de 300.000 euros; asumió sus responsabilidades y quiere restituir el daño económico que ha causado. Por lo visto, Matas ha sido muy hábil y no permanecerá -creo- muchos años en la cárcel. Todo lo contrario de nuestro paisano, José Juan Cardona, Pepe d'es ‘Ferrer', antiguo conseller de Comercio, Industria y Energía del Govern Balear, condenado por varios delitos de corrupción por liderar una trama por la que se desviaron unos cinco millones de euros del Consorcio del Desarrollo Económico de la CAIB. Si José Juan Cardona hubiese actuado con inteligencia ante el tribunal, como hicieron Kurt Vianne, Antonia Ordinas (la que guardaba 250. 000 euros en una caja de Cola-Cao enterrada en su jardín) y Jaume Matas, posiblemente habría podido reducir la condena de 16 años a la que fue condenado el 13 de julio de 2013 y que está cumpliendo en la cárcel de Ibiza. El caso es que a Jaume Matas se le ve bien, con porte elegante, mientras que nuestro Pepe d'es Ferrer está muy deteriorado y ha perdido mucho peso, según me contaron unos testigos que lo vieron entrar enmanillado esta semana en la Clínica Vilás custodiado por una pareja de la Guardia Civil. Para algunos, la vida es cruel.
El impuesto turístico, la ecotasa, que quiere aplicar ya mismo el Govern balear, parece ser que tiene problemas a causa de la posición adoptada por Podemos, en el sentido que propone crear una comisión sobre dicha tasa para llegar a consensos. Y es que mientras el conseller Barceló ha manifestado que el impuesto es prioritariamente medioambiental y pide tranquilidad ante la tramitación del impuesto, Podemos critica que la ecotasa se destine a otros fines que no sean medioambientales. Por otra parte, Podemos califica el impuesto turístico de fraude a la ciudadanía. Ya ven, un follón que se ha armado en Palma, pero también ha señalado el PSIB que apuesta por crear una comisión que decida destinación de la ecotasa. Háganlo, pero bien hecho. El dinero que se recaude, si es que se llega a hacer, que sirva para solucionar problemas medioambientales y eliminar la suciedad en Ibiza. No sea que pase lo mismo que con un dinero destinado a la mejora del Patrimonio d la Humanidad, que se utilizó para reformar la Avda. España de Eivissa.
Se está poniendo de moda realizar consultas para que los ciudadanos puedan opinar sobre determinados asuntos que afectan a un territorio, y me estoy refiriendo a la mejora de la carretera de Santa Eulària. Mi propuesta es que se haga una consulta entre los vecinos con domicilios situados a ambos lados de la vía, pero también a los sufridos conductores de vehículos que sufren retenciones y atascos todo el año.