Viva la sanidad pública. Nunca deberíamos olvidar la suerte que tenemos de tener una sanidad pública y universal. A veces se nos olvida esta realidad cuando criticamos ciertas carencias o problemas del sistema sanitario en tiempo de crisis, pero es necesario recordar siempre su gran valor. Por supuesto que la sanidad pública no es perfecta, y claro que tiene muchas debilidades – como consecuencia de una mala gestión política – como son los recortes sanitarios, las largas listas de espera, la demanda de las Urgencias o la falta de profesionales. No obstante, pese a estos problemas, las gerencias de los hospitales siguen creando servicios asistenciales que ponen siempre al paciente en el centro del sistema sanitario con una atención enfocada en sus necesidades.
Es el caso de las diferentes unidades de Hospitalización a Domicilio encargadas de ofrecer un servicio médico y cuidados en el domicilio del paciente. Esta prestación, que cumplió 25 años en Ibiza, todavía sigue siendo una gran desconocida para los usuarios del Área de Salud de Ibiza y Formentera. Así lo trasladaron profesionales de la UHD a este periódico durante uno de los turnos de trabajo en varias viviendas de Sant Antoni.
A lo largo de estas visitas, este medio pudo observar el funcionamiento de la unidad y cómo las sanitarias ofrecían una asistencia completa, cómoda y eficaz ante la muestra de gratitud de Sheila y Vicent, los dos pacientes que fueron atendidos durante esa jornada. Ambos estaban relajados, tranquilos y holgados mientras recibían tanto la atención médica en sus hogares como el apoyo de sus familiares que se encontraban en el domicilio.
Sin duda, este servicio, además de los beneficios que supone para Can Misses, como son la liberación de camas en el hospital o la reducción de los costos hospitalarios, es la unidad sanitaria más amable de Ibiza que mejora el bienestar del paciente y de sus cuidadores principales.