Ibiza ha vivido uno de los peores temporales que se recuerdan: más de 300 litros por metro cuadrado cayeron sobre la ciudad en apenas unas horas. Calles convertidas en ríos, viviendas anegadas, coches flotando, cortes de luz y miedo. Pero dentro del caos, hay algo que merece ser contado: la reacción ejemplar de las instituciones.
El Ayuntamiento de Vila, el Consell d’Eivissa, el Govern Balear y la Delegación del Gobierno activaron protocolos de emergencia de forma coordinada y eficaz. No hubo titubeos. No hubo competencias cruzadas. Solo acción rápida y directa. Y eso, en una isla acostumbrada a los tiempos lentos, marca la diferencia entre el susto y la tragedia. Con el precedente de Valencia en el retrovisor, ha habido una extraordinaria comunicación que nos ha permitido estar informados minuto a minuto de la evolución de la situación de nuestras calles y carreteras.
Y si hablamos de rapidez, imposible no destacar a la UME, que aterrizó en Ibiza en menos de doce horas. Su llegada fue un punto de inflexión. Mientras el agua seguía desbordando, ellos ya estaban achicando, rescatando y asegurando zonas críticas. Su despliegue, meticuloso y contundente, evitó lo que pudo haber sido una auténtica catástrofe.
En tiempos donde muchas veces las instituciones se enredan en discursos vacíos, lo de Ibiza ha sido una lección: cuando abandonan el partidismo sectario, funcionan. Ahora queda evaluar daños y responder con la misma eficacia.
Por una vez, no sólo quedémonos con la imagen del desastre. Quedémonos también con la del trabajo en equipo, la reacción inmediata y la solidaridad que empapa más que cualquier tormenta. No es momento ahora de enfangar, sino de agilizar la llegada de ayudas económicas a las familias y comercios que lo han perdido todo.
Fueron 253 l/M2 en Vila para la jornada del 30 sept 2025.. esperemos q sirva para q nuestras instituciones pasen a la prevención en lugar de echarse flores por reaccionar correctamente, una de sus funciones básicas. Ejemplos de soluciones preventivas los tienen en innumerables países de clima tropical , donde 300 l /m2 caen a diario varios meses al año.