A menos de diez días para llegar al mes de julio y las playas de Vila están sin hamacas y sombrillas por un tema administrativo. Falta un certificado y las empresas que optan al servicio están pendientes de la adjudicación definitiva, pero realmente sorprende la incapacidad del Ayuntamiento de Vila para dotar de servicios las playas después de dos años prácticamente sin actividad turística. A algunos concejales les sonará raro pero muchos turistas, y también residentes, quieren hamacas y tumbonas para pasar el día.
Una compensación para los sufridos comerciantes de Isidor Macabich
Parece muy razonable la propuesta del PP de suspender las tasas que deben pagar los negocios de Isidor Macabich, que este verano tienen que sufrir unas obras de remodelación para que Ruiz y su equipo puedan presumir de la reforma antes de las elecciones. No pagar determinadas tasas no les va a resolver sus problemas económicos, pero seguramente ayudará a más de uno. Y después de dos años sufriendo una temporada turística al ralentí los comerciantes tienen motivos para estar más que indignados contra el gobierno de Vila.