Ya ha dejado de ser noticia que sa Llavanera provoque vertidos (el último el domingo) pero lo que sí deberían saber los ciudadanos es qué gestiones hace el Ayuntamiento de Vila para defender a los vecinos que soportan esta situación medioambientalmente tan lamentable. Porque se habló de expediente que luego se convirtió en solicitud de información, una manera de ir pasando los meses sin tomar decisiones firmes contra los responsables de esta anomalía medioambiental: el Govern y el Ministerio de Transición.
Contratos indefinidos en las empresas y temporales en la administración
Con los datos de empleo de récord que se presentan durante los últimos días se destaca que mayoritariamente los contratos que se hacen en las Pitiusas son indefinidos para cumplir la nueva reforma laboral. Eso genera estabilidad al trabajador, pero lo sorprendente es que los políticos presuman de estos contratos indefinidos y, a la vez, se permita que haya tanta temporalidad en la administración. En el caso de Vila es escandaloso. El 40% de los 500 empleados son temporales. Estaría bien aplicarse la norma que imponen a los empresarios.
Es que para solucionar el problema de los vertidos incontrolados a Sa Llavanera Rafa tendría que tirar contra el Govern de Frangina y eso nunca, antes tapados de mierd.a. Y en el tema de la temporalidad en el empleo, Rafa usa la máxima de en casa del herrero cuchara de madera, se la trae al pairo que en el caso de Vila el 40% de los 500 empleados sean temporales. Rafa ese alcaldillo socialista ( ¡¡¡ y una mierd.a !!! ) que vino tras las tres alcaldesas peperas, menudos 10 años que llevamos en Vila