Si hay dos personas a quienes les gusta el deporte y tienen claro que este no tiene edad son Montse Cirera y María Rodríguez, dos jubiladas de 73 y 67 años respectivamente, que siguen activas en la andanza de las aventuras deportivas.
Las dos deportistas se atreven a todo, pues suelen ir a esquiar, practican running y afirman que así seguirán «al menos hasta que el cuerpo aguante». Pero Montse y María no solamente van por tierra, también buscan sortear las olas, como ya demostraron en el taller de vela de ‘Eivissa en Gran' y en el del Día de la Piragua celebrados este verano.
Estas dos jornadas celebradas en el Club Nàutic Sant Antoni las alentaron a proponer a los monitores del Club a hacer una prueba de nivel para ingresar a la actividad de windsurf para adultos que oferta el club.
Su propuesta fue aceptada y, tras demostrar de la pasta que están hechas como deportistas competitivas, las dos destacaron la implicación de los técnicos del CNSA para motivarlas y animarlas a navegar sobre una tabla de windsurf.
Montse hacía 40 años que no se subía a una tabla, pero exhibió que no ha olvidado la técnica, siendo capaz de navegar sin apenas caerse.
María, por el contrario, tuvo que esforzarse más para mantenerse en pie, algo que finalmente
consiguió y que ella misma definió como todo un éxito.