Los mayores de es Cubells siguen disfrutando de la programación de actos con motivo de las fiestas de Santa Teresa. Si el pasado miércoles disfrutaban de una jornada muy especial, con la celebración de Santa Teresa, con una jornada llena de música y tradición, durante el mediodía de este viernes fue el turno de la tradicional comida de mayores. En este sentido, en el restaurante Tropicana disfrutaron de un variado menú donde, pese a contar con croquetas y ensalada de entrante, o flaó de postre, la gran protagonista fue la paella.
Hasta 65 personas acudieron a esta jornada tan especial que, según ellos mismos explicaron «sirve para reencontrarse con amigos y familiares». Es Cubells es un pueblo pequeño, donde prácticamente todos se conocen, tal y como aseguró Pepa Marí, quien afirmó conocer a todo el mundo «salvo a un pequeño círculo que se ha colado en una de las mesas del fondo»
Eventos como el de este viernes hacen las delicias de estos mayores, quienes de una jornada diferente junto a sus amigos y conocidos de toda la vida. Muchos de ellos incluso coinciden con una idea:eventos como este deberían celebrarse más frecuentemente. «Como mínimo, dos veces al año, uno antes de verano y otra vez, como ahora, cuando termina», aseguró incluso uno de ellos, llevándose la aprobación de los demás miembros de la mesa.
No es la primera vez que acuden a este restaurante. Hace dos años vinieron a éste mismo, pero la anterior esta edición se celebró en un establecimiento en Platja den Bossa. «Este es mejor con diferencia», afirmó Catalina, contenta de volver a Tropicana. Junto a ella están sus dos hermanas, que también estaban disfrutando de la comida. Más allá de lo familiar, a su lado se encontraban un matrimonio, también viejos conocidos del pueblo, que incidían en «lo buena que está la paella».
Una idea que se repitió a lo largo de las diferentes mesas, donde los vecinos se identificaban por las casas de las que forman parte, algo muy típico de la idiosincrasia ibicenca. Es el caso de, por ejemplo, «los de Can Palau», formado por un matrimonio, Pep Ferrer y Catalina Clapés, quienes afirmaron ser «de es Cubells de toda la vida», algo que se repitió entre los diferentes asistentes a la comida. Junto a ellos, unos «amigos de toda la vida» que, en este caso, son de «Can Rafal». Esta unidad familiar está formada por Vicente y Nona, quienes repteían lo mismo que todos los comensales previos:«lo mucho que están disfrutando de la comida».
Con todo, la de este viernes fue una jornada de gastronomía muy especial para esos mayores que no siempre tienen la suerte de poder disfrutar de días así. Jornadas de emotivos reencuentros para los vecinos de es Cubells.