El Área de Salud de Ibiza y Formentera ha instalado en el Hospital Can Misses dos aparatos sanitarios para pacientes ostomizados.
Las ostomías o estomas de eliminación son orificios realizados de manera quirúrgica en el abdomen donde se fija al conducto, ya sea del sistema digestivo o urológico. Esto permite que la orina o las heces sean expulsadas del cuerpo y se recogen en unos sistemas recolectores, llamados popularmente "bolsas". El trabajo de enfermería es fundamental para mantener informado al paciente y realizar el seguimiento de la ostomía.
Un cuidado y educación sanitaria pre y postoperatorias ayudan al paciente a estar preparado, reducir el estrés asociado al procedimiento y aceptar mejor su nueva condición. Es importante recalcar que estos pacientes pueden llevar un estilo de vida normal: pueden viajar, practicar deporte, tener actividad sexual, etc. La creación de la figura de la enfermera de práctica avanzada en estomaterapia potencia esta atención integral experta para que los pacientes puedan cuidar y manejar su ostomía de forma independiente.
El Área de Salud de Ibiza y Formentera tiene en seguimiento unos 500 pacientes ostomizados
En el Hospital Can Misses existe una consulta de enfermería para estos casos que conduce la enfermera en cuidados estomaterapéuticos de las personas ostomizadas, familiares y/o cuidadores, Marta Bombardó Soria, coordinadamente con la Unidad de Hospitalización de Cirugía que tiene como supervisora a Eva García Hornero.
Las enfermeras estomaterapeutas dan soporte a los pacientes para facilitar la búsqueda de estrategias de afrontamiento centradas en el problema que les preocupe. La educación en los cuidados del estoma es primordial para empoderar a los pacientes en su autocuidado, ya sea temporal o definitivo. Se conoce que la educación terapéutica en los cuidados tiene un impacto muy positivo en la calidad de vida y reduce el gasto sanitario. Actualmente hay en la Consulta de ostomías 500 personas en seguimiento.
El objetivo de la instalación de estos aseos adaptados para personas con ostomías es normalizar la vida de las personas que vive con una bolsa adosada a su abdomen y garantizar condiciones saludables, higiénicas y de intimidad.
Para ello se ha invertido 4.745,62 € (IVA incluido) en dos aparatos sanitarios y de aseo que garantizan la igualdad de servicios.
Los aseos instalados para personas ostomizadas están fabricados con materiales de última generación de fácil limpieza como el Krion, un material mineral compacto no poroso antibacteriano y antifúngico con certificaciones de calidad ISO, HPD, NSF, CSA y ASTM, e incluyen un mueble con encimera, inodoro de porcelana para el vertido de fecales, espejo, grifería adaptada sobre un soporte vertical de tablero hidrófugo recubierto de lámina HPL, colgador para bolsos, jabonera, portarrollos y espejo.
Se han instalado dos aseos para persona ostomizadas en el hospital Can Misses, uno en el edificio de Consultas externas, junto a la consulta de Ostomías y heridas ubicada en la planta sótano, y otro en la Unidad de Hospitalización de Cirugía, en la cuarta planta del edificio I.
Otra de las ventajas de la instalación de los baños adaptados para personas con ostomía es el control de la propagación de bacterias intestinales, en ocasiones multirresistentes, la más común es la Escherichia Coli, causante de sepsis.
Para el subdirector de gestión y servicios generales, Antonio Vázquez «los retretes convencionales o los adaptados para personas con movilidad reducida no son funcionales para el vaciado de una bolsa de ostomía y menos aún para su posterior lavado. Por ello, la instalación de estos dos aseos adaptados para usuarios con ostomía permite la accesibilidad de estas personas que normalmente ven limitada su vida social por temor a no disponer de un aseo adaptado a sus necesidades. Con estos aseos les ofrecemos un lugar seguro e higiénico y garantizamos su intimidad».