Es Canar celebró su día grande en honor a Sant Cristòfol con una jornada llena de tradición y participación vecinal. La misa comenzó a las siete de la tarde en la pequeña capilla del pueblo, oficiada por el vicario Fabián. El templo, que está abierto por los laterales con arcos típicos de la arquitectura ibicenca, se llenó por completo. Muchos asistentes hacían uso de abanicos para mitigar el calor, aunque la brisa suave que entraba por ambos lados refrescaba el ambiente.
El coro de Sant Carles abrió la ceremonia con cánticos, y poco después los ressonadors hicieron su entrada tocando, seguidos de las autoridades locales, entre ellas el expresidente del Consell y exalcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, y la alcaldesa Carmen Ferrer. Durante la homilía se recordó la importancia de mantener vivas las tradiciones que forman parte de la historia del pueblo.
Al salir de la capilla, sobre una mesa esperaban las orelletes ya organizadas para repartir entre los asistentes, junto a botellas de agua, imprescindibles en un día tan caluroso.
A continuación, tuvo lugar el desfile de carros, con vecinos que llegaron con sus carruajes tirados por caballos. La gente se reunió a lo largo del recorrido para seguir el paso de la comitiva. Familias completas, desde niños pequeños hasta abuelos, disfrutaban del evento y del día festivo. Muchos coincidían en que estas fiestas son una ocasión para reencontrarse con amigos y vecinos. Una vecina recordaba que «es un momento para compartir recuerdos».
«No hay día más importante para nosotros que celebrar a nuestro patrón. Vamos a misa, vemos el desfile y compartimos la paella popular», explicó Noemí, integrante de la asociación de vecinos. Para ella, la fiesta es también un reencuentro anual que sirve para recordar a quienes ya no están: «Es emocionante ver a los mayores y pensar en los que faltan».
Gabriel Noguera, presidente de la asociación de vecinos de Es Canar, calificó la jornada como «muy positiva» y valoró la participación. «Es un día de celebración. Hemos preparado música, baile payés y paella. eEs muy importante mantener nuestras tradiciones», señaló.
La Banda Municipal de Música ofreció un concierto en el embarcadero, interpretando piezas populares y pasodobles frente al mar, donde decenas de personas disfrutaron de un ambiente familiar. Para cerrar la celebración, la Colla de Ball Pagès de Sant Carles actuó con los bailes tradicionales.
Molta Festa i mentras tant . Sa platge de Santa Eularia plena de merda!