Sa Nostra Sala inaugura este jueves la exposición fotográfica ‘Anys vuitanta. L’Eivissa que desapareixia’, una selección de 47 imágenes en blanco y negro y color del fotógrafo alemán Wolfgang Löffler. Procedentes del fondo del Archivo de Imagen y Sonido del Consell Insular d’Eivissa, estas fotografías capturan una isla de los años 80, retratando la vida cotidiana, el paisaje rural y las tradiciones que poco a poco han ido desapareciendo.
Sara Ramón, consejera de Cultura del Consell d’Eivissa, presentó el proyecto y destacó la emoción que supone contar con la presencia del propio Wolfgang Löffler durante la inauguración. «Es un privilegio tener aquí al autor, que ha mantenido ese vínculo especial con Ibiza gracias a su familia, especialmente a su hermana Ingrid, que vive en Sant Josep», explicó. Ramón recordó que la mirada de Löffler ha sido fundamental para preservar la memoria visual de la isla.
Por su parte, Joan-Albert Ribas, técnico del Departamento de Cultura y comisario de la exposición, valoró el gran patrimonio documental que supone esta colección. «Contamos con más de 260 fotos en el archivo, pero hemos seleccionado una muestra que refleja una Ibiza que ya no existe: sus tradiciones, las tareas rurales, el modo de vida que se ha perdido en poco más de cuatro décadas», comentó. También señaló que la exposición incluye un catálogo con textos de la periodista Clàudia Roig y del propio autor, que contextualizan socioculturalmente las imágenes.
Wolfgang Löffler agradeció a todas las familias ibicencas que le abrieron sus casas y permitieron que documentara sus vidas, trabajos y costumbres. «Ibiza es conocida por sus fiestas y discotecas, pero yo vine a buscar el paisaje, la paz y la tranquilidad de su gente, especialmente en invierno, cuando la isla está más calmada», explicó. Recordó lo difícil que fue captar el contraste entre el mundo rural tradicional y el joven que buscaba modernidad y diversión, dos realidades que convivían entonces separadas pero que retrató en sus fotos junto a caminos, iglesias y casas antiguas.
La exposición estará abierta al público hasta el 7 de agosto y se presenta como una oportunidad para conocer una época clave en la evolución de Ibiza.