Juan Carlos Rubertiello reconocía ayer sentirse «feliz, nervioso y con una emoción especial» ante la ordenación presbiteral que le convirtió este sábado en nuevo sacerdote de la Diócesis de Ibiza y Formentera.
Con la mirada puesta en el cielo y en cómo se iba a comportar la climatología durante el acto religioso celebrado en la Catedral, Rubertiello pudo estar acompañado por dos de sus hermanos, uno de ellos su gemelo. Su madre, que no pudo viajar hasta la isla, siguió la ceremonia a través de las redes sociales.
«Yo venía de la misión y ahora el sacerdocio es una transformación importante, una gran decisión, y sobre todo la posibilidad de comenzar el servicio en la Iglesia a través de la vida de los sacramentos y la difusión del Evangelio», explicó a Periódico de Ibiza y Formentera.
Según reconoció, a pesar de la ‘llamada’, convertirse en sacerdote no fue una decisión fácil y «no debe tomarse arbitraria o superficialmente, sino que se debe excavar en el interior y aceptar lo que Dios quiera en la vida de uno, aunque desde la libertad».
«Si les dices sí, la satisfacción interior es una manera de vivir absolutamente gratificante», insistió.
En la ceremonia religiosa no faltaron los ritos más solemnes como las Letanías a los Santos, la imposición de manos o el acto de investidura.
En su homilía, el obispo Vicent Ribas recordó que este domingo precisamente se cumplen 29 años de su ordenación sacerdotal en la Catedral de Ibiza, «un acontecimiento que marcó mi vida». También destacó la importancia de la fidelidad en el ministerio sacerdotal.
El obispo, además, sorprendió a todos leyendo el mensaje remitido por el Papa León a un sacerdote de la Diócesis que compartió pupitre con él, según explicó Ribas. «Saludos al nuevo sacerdote, Juan Carlos. Dile que le acompaño en oración y envío una bendición especial. Un abrazo, Papa León XIV». Tras escuchar el mensaje, todos los asistentes rompieron a aplaudir.
De padre italiano, madre española y nacido en Venezuela, el nuevo sacerdote comenzó en su país los estudios teológicos para completar después su formación en España.
Diácono hasta ahora en la parroquia de Sant Antoni, este domingo Rubertiello oficiará su primera misa a las 11 horas en la parroquia de Nuestra Señora del Rosario.