Las temperaturas veraniegas se resisten a abandonar la isla. Y esto se nota en un mercado que ve como uno de sus productos estrella del otoño, los pabrassos, se resiste a llegar, por ese frío que no llega y esas lluvias que llegaron de manera tardía. «A primera hora de la mañana teníamos colas de gente que nos los estaba pidiendo», asegura Héctor, de Frutas Catalina. Y es que estas setas son un bien muy buscado, y las cantidadesque estan llegando al mercado no cumplen con la demanda de estas. «De Ibiza no nos da con lo que nos traen para todo lo que nos piden. De fuera, de Alicante, si que nos llegan algunos más, que se venden también muy bien», asegura Margarita Boned, de la frutería del Mercat Nou que lleva ese mismo nombre.
Sin embargo, lo que sí que está llegando, en grandes cantidades y en tamaños muy notables, de hasta más de tres kilos, son las coles. Estas también son un producto muy reclamado en los diferentes puestos del mercado, puesto que forman parte de uno de los platos más típicos de la gastronomía ibicenca de los meses de otoño, como son los ossos amb col.
Sin embargo, este no el único producto del campo de temporada, sino que estos son ya varios: «desde mandarinas y limones, que están comenzando, como también los aguacates, además de la verdura de aquí, como las acelgas o la lechuga», explica Margarita.
De Frutas y Verduras Riera, Marga coincide en qué es lo que más se pide: «los pabrassos son muy habituales, por mucho que a la gente de aquí le guste mucho ir al bosque a cogerlos. El arròs de matances es muy típico de esta época, tal y como también lo es la col», asegura.