Más de una veintena de vecinos de Formentera, de diferentes edades y profesiones, consultados ayer por este rotativo coincidieron en su total oposición a la decisión de la Autoritat Portuària de Balears (APB) de trasladar a los muelles comerciales el atraque de las barcas que hacen la ruta entre ambas islas.
Un buen número de los ciudadanos consultados fue reacio a salir en la foto, pero por unanimidad todos coincidieron en que esto supone una dificultad agregada a la triple insularidad que vive la isla de Formentera en la que están empadronadas más de 10.000 personas.
«Que la dejen donde está ahora», «seguro que es para montar un muelle para yates», o «es injusto que nuestra isla vecina no tenga en cuenta las necesidades de los formenterenses que dependemos de ella para múltiples trámites o tratamientos hospitalarios», «para ellos somos transparentes», fueron algunos de los comentarios que hicieron sentir los veicnos consultados.
El clima que trasciende sobre este tema en los corrillos típicos de invierno es de un no rotundo y clamor por la revisión del proyecto. Un asunto que traerá cola y por esta razón, hoy a las 11,00 horas está prevista una reunión extraordinaria del equipo de gobierno con los representantes de los partidos en la oposición de la que daremos cuenta en la edición de mañana domingo. María, una vecina de la isla que nos confesó tener «ochenta y pico bien llevados», con la sabiduría que da la edad apuntó que «todos se tienen que poner de acuerdo y escuchar la voz de Formentera».
Otra residente que escuchó la pregunta comentó que, «nos van a convertir en más desgraciados de lo que ya somos y los vecinos no debemos resignarnos; hay que protestar y exigir a nuestros políticos que hagan lo que puedan y más para conseguir otra solución».