El Consell de Formentera tendrá un presupuesto para el año 2017 de 23.815.000 euros, una cantidad un 6,91% superior a la de este año. Unas cuentas que, así como sus entresijos, fueron presentados ayer por la mañana en el Consell por el conseller de Hacienda, Bartomeu Escandell, acompañado por el presidente Jaume Ferrer.
En el capítulo de ingresos, la máxima institución insular recibirá 6,1 millones del Gobiern balear y 3,8 del Estado, a los que se tienen que añadir 6.012.000 euros en concepto de tasas, 6.255.000 en impuestos directos y 390.000 en indirectos. Por primera vez los ingresos recaudados en la isla superan a los externos, aunque solo en cuatro puntos porcentuales.
Según el conceller Escandell, son éstos unos presupuestos pensados con vocación de servicio a la ciudadanía con tres líneas a destacar: el medio ambiente, la movilidad y la inversión en mejoras de servicios que ya son operativos. Así se refleja en el capítulo de gastos, tanto con los 8,8 millones destinados a personal como los casi 10 millones en bienes corrientes y servicios, con un nuevo servicio de inspección que se suma al equipo de controladores de movilidad así como mejoras en el equipo de socorrismo, bomberos, escuela de música, escoleta y colectivos de limpieza y de auxiliares administrativos.
En capítulo de inversiones se cuenta con 3.250.000 euros y cobra protagonismo la mejora de los cascos urbanos y turísticos de la isla, con una partida de 2.150.000 euros para la primera fase de remodelación del núcleo des Pujols, una zona que el equipo de gobierno considera que necesita reformas no solo a nivel paisajístico, sino también en cuanto a conexiones y servicios. Se dispone también una partida de 100.000 euros para la ordenación y protección de s'Estany des Peix, cantidad análoga a la que se destinará a la rehabilitación del faro de la Mola para usos culturales. Así mismo, 325.000 euros se destinarán al funcionamiento ordinario y participación del Consell d'Entitats.
Desde las filas ‘populares' se critican las sucesivas subidas de impuestos que, dicen, se han triplicado desde que entraron a gobernar GxF y PSOE en 2007. Recuerdan, además, que los presupuestos vuelven a olvidarse de la Savina y repiten inversiones no ejecutadas en Sant Ferran y ses Bardetes. Además, encuentran exagerado el crecimiento exponencial de trabajadores que, en su opinión, cuentan en la mayoría de los casos con contratos interinos basados en la precariedad laboral.