Los trabajos de seguimiento arqueológico previos a la construcción de un nuevo edificio en la zona de Sa Tanca Vella, en las afueras de Sant Francesc, han dejado al descubierto un cementerio perteneciente a la época romano bizantina. La necrópolis, que dataría de los siglos VI y VII después de Cristo y cumplió su función a lo largo de siglo y medio aproximadamente, contiene diversas tumbas de las cuales dos ya han sido excavadas y otro par está en proceso. De momento, las excavaciones, llevadas a término por tres arqueólogos de la empresa ibicenca Posidònia, han permitido el hallazgo de ocho esqueletos tanto de niños como de adultos, ya que cada tumba fue reaprovechada y contiene más de un cadáver además de cerámicas y otros enseres.
Se cree que la extensión de este camposanto podría ser mayor, albergando hasta una docena de sepulcros, por lo que se prevé que los trabajos de investigación se extiendan a los terrenos adyacentes al hallazgo y se alarguen varios meses a fin de mapear la zona y poder documentar mejor el asentamiento de origen de los difuntos y su modus vivendi.