Agentes de la Guardia Civil han denunciado a 13 personas que participaban en una fiesta que se celebraba la madrugada del jueves en un domicilio ubicado en Punta Prima, en Formentera.
Según informaron ayer desde la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Guardia Civil, los hechos se desencadenaron de madrugada, cuando una patrulla que realizaba labores de Seguridad Ciudadana por la zona de Punta Prima advirtió la música y el ruido que procedía del interior de una finca.
Las mismas fuentes detallaron que «el volumen de la música era demasiado alto, al tiempo que había numerosos vehículos estacionados en las inmediaciones de la vivienda, hecho inusual por aquella zona».
Los guardias civiles requirieron a la propietaria de la casa que cesara la actividad y ésta, según las mismas fuentes, les manifestó que «estaba de celebración con unos amigos y no tenía intención de cesar la fiesta».
Los agentes se quedaron en el lugar durante toda la noche y cuando los asistentes iban saliendo de la vivienda, fueron identificados, uno por uno, siendo denunciados todos ellos por incumplir la normativa en materia de salud pública derivada de la crisis sanitaria provocada por la COVID-19, incluida la organizadora y propietaria del domicilio.
Desde el día 29 de diciembre la isla de Formentera está en situación de riesgo alto, nivel 3 decretado por Govern Balear; por lo que la sanción a la que se enfrentan los denunciados si se considera infracción grave sería de una multa de entre 3.001 y 60.000 euros. Asimismo, si la autoridad competente considera que la organizadora o alguno de los participantes a la fiesta hubieran incurrido en una infracción muy grave, podrían ser sancionados con una multa de hasta 600.000 euros.