Las terrazas en Formentera podrán abrir desde la próxima semana de manera continua hasta las 22.30 horas de lunes a domingo, según ha anunciado este viernes el conseller de Movilidad y Vivienda, Josep Marí.
En cuanto a los interiores de los establecimientos de restauración, éstos mantendrán el aforo al 50 por ciento, con mesas de cuatro personas de hasta dos núcleos y su cierre será a las 17.00 horas de lunes a jueves y a las 18.00 horas los viernes, sábados y domingos. Las terrazas mantendrán el 100 por cien de su capacidad, con mesas de seis personas.
El conseller de Movilidad y Vivienda, Josep Marí, se ha reunido en la Isla con la presidenta del Consell de Formentera, Alejandra Ferrer, para abordar las nuevas restricciones, encuentro al que también ha asistido la directora general de Salud Pública, María Antonia Font.
En rueda de prensa, Ferrer ha señalado que la evolución de la pandemia registra "datos muy favorables" en Formentera, con una incidencia de 0 casos a 7 y 14 días. Así, según ha explicado la presidenta, se relajarán medidas que se aplican en la Isla, aunque se mantiene el objetivo de llevar a cabo una desescalada lenta para llegar en "buen estado" al verano. Los cambios anunciados este viernes habían sido solicitados desde la Isla.
Sobre el toque de queda, Ferrer ha considerado que era "muy importante" conseguir su continuidad durante dos semanas más puesto que las previsiones son iniciar la temporada a finales de mayo o principios de junio y se debe garantizar la seguridad sanitaria de los residentes.
Ferrer ha recordado también la aprobación del Plan de Reactivación Turística que incluye medidas como continuar con los controles durante todo el verano. También ha vuelto a pedir colaboración para llevar a cabo PCR en la Isla a precios competitivos. Asimismo, ha recordado la solicitud de que los datos de contagios relativos a residentes y turistas se contabilicen por separado para evitar dar pasos hacia atrás en las restricciones.
Además, la presidenta ha pedido a la población que sea solidaria y acuda a vacunarse en cuanto se reciba la llamada.
Marí Ribas, por su parte, ha comenzado agradeciendo la labor de los responsables políticos y de la población de Formentera por la situación epidemiológica de la Isla con dos casos activos. "Alguien puede pensar que esto ya está terminando y que nos podemos relajar", ha puntualizado Marí, quien ha considerado que se debe mandar un mensaje de prudencia y que la desescalada debe ser lenta porque aún "tenemos el peligro entre nosotros".
"Aflojar, pero poco a poco", ha insistido, recordando que en mayo todavía hay que mantener la precaución puesto que en junio habrá un mayor ritmo de vacunación y, por lo tanto, mayor seguridad frente al virus.
Entre los cambios, Marí ha señalado que en Formentera prácticamente las restricciones quedan igual, aunque eventos como bodas o bautizos podrán tener un mayor aforo y se podrá ir a la playa desde las 06.00 horas.