El presidente del Consell Insular de Formentera, Llorenç Córdoba ha señalado que, según las últimas informaciones que maneja la institución, dada la profundidad en la que se encuentran los restos del yate ‘Irmao' hundido la semana pasada y de su situación, es posible que «la mejor opción no sea reflotarlo y dejarlo como un resto ya que sacarlo podría ser perjudicial para el medio ambiente».
Córdoba ha reconocido que «lo importante de este asunto era saber qué restos contaminantes podía provocar esta embarcación hundida» y «desde Capitanía Marítima nos han dicho que se ha quemado todo el combustible en el incendio. Lo que queda del barco es muy poca cosa ya que es un barco de fibra y cuando se quemó se calcinó prácticamente todo». Una información que desde el Consell aseguran haber podido comprobar tras solicitar la colaboración de un pescador llamado David Sánchez Colomar para bajar un robot con una cámara, a 60 metros de profundidad a las 48 horas del hundimiento del yate. «Parece que es un fondo plano que debería dar problemas y, lo más importante, vemos que no hay fugas del depósito de combustible ni aceite y alrededor de la embarcación está limpio», han detallado desde el Consell de Formentera.
El presidente insular ha indicado que desde la institución se ha estado vigilando hasta el momento cada día la zona del hundimiento para controlar que no haya ningún tipo de contaminación. «Lo que sí es cierto es que salen plásticos de este barco, y continuarán saliendo durante unas semanas, y lo que estamos haciendo es enviar barcos de limpieza del litoral para que vayan limpiando estos residuos para que no lleguen a la costa».