Un centenar de padres y madres, acompañados de sus hijos, protestaron ayer ante la Direcció d'Educació en las Pitiüses para evitar que 30 niños de educación infantil se queden sin plaza en la Consolación. Coreando el lema «todos son alumnos», los padres, entre los que figuraba el director insular Luis Carlos Fernández Tejerina, se manifestaron ayer desde el colegio hasta la sede de Educació para presentar un escrito con 200 firmas. Tejerina manifestó que su asistencia a este acto se debía a su condición paternal: «Soy padre antes que delegado», dijo.
El problema surgió al camiar el centro privado a concertado. «Los padres desconocían que se tenía que realizar un baremo exhaustivo y se ha registrado un número mayor de admisiones que las plazas, con lo que niños escolarizados se irán a otro colegio», explicó la vicepresidenta de la Asociación de Padres de la Consolación, Patricia Abascal. La única solución que contemplan es aumentar el número de alumnos por aula. Abascal aseguró que tanto «el colegio, los padres y los profesores están dispuestos a asumirlos».
De este modo, han pedido a la Comisión de Escolarización que los niños sigan en el centro. Precisaron que su deseo es que tanto los niños ya escolarizados como los que han pedido una plaza puedan acceder al centro.