Vecinos, transportistas y taxistas coinciden en que las carreteras no son sólo el supuesto tramo más corto entre dos lugares sino un instrumento de trabajo y un elemento que influye en la calidad de vida de los ciudadanos.
Si se toman como referencia las opiniones sobre el tema recogidas en la Asociación de Vecinos de Sant Rafel, en la Asociación de Taxistas Independientes, en la Asociación de Transporte Discrecional y en la empresa de Autobuses de Sant Antoni, no hay lugar para el debate sobre el modelo de carreteras que necesita Eivissa, ya que todos coinciden en que hay que centrar los esfuerzos en reducir la siniestralidad de las vías y hacerlas más cómodas.
La asociación de vecinos de Sant Rafel, muy sensibilizada por el tema, manifiesta su total decantación por unas carreteras seguras, con mejores accesos y más tranquilas. «Las distancias en Eivissa -explican- son lo suficientemente cortas como para que un aumento de velocidad no se traduzca en un ahorro significativo de tiempo».
Entre las soluciones que aportan está el aumento de control policial, mejor y más señalización, ya que la actual es deficiente, e iluminar determinados puntos.
Pep Cardona, directivo de la asociación vecinal propone un debate público sobre este tema en el que deberían participar las autoridades, los vecinos, las asociaciones de transportistas, de taxistas y por supuesto, representantes de la Dirección General de Tráfico. «Las soluciones que se aporten deberían aplicares, insta Cardona.