El número dos del Partido Popular de Eivissa y Formentera, Pere Palau, quiso apuntar ayer una nueva crítica a la ley de consells que no viene reflejada en el informe del Consell Consultiu pero que su grupo considera fundamental: el elevado coste que podría suponer en gastos de personal.
Palau señaló que, tal y como está redactado el anteproyecto de la ley, Balears tendría cuatro gobiernos (uno general para el archipiélago y otro para cada una de las islas), lo que supondría un mayor número de funcionarios públicos para las mismas necesidades que existen actualmente. «El Consell Consultiu en su informe, en el que critica cosas que nosotros ya habíamos advertido, no entra en las cuestiones económicas, pero es muy importante que quede claro que el futuro de Balears podría quedar hipotecado si se multiplican los gastos de personal de esta manera», señaló Palau. «Es nuestra obligación advertir esto», añadió.
El PP califica esta ley de «capricho» de los partidos que conforman el Pacte de Progrés y criticó a estas formaciones por hacer «uso y abuso de la mayoría». Según Palau, ésta es la tercera vez que la izquierda ha cedido a la exigencia de un partido concreto, después de haber aprobado una moratoria de campos de golf que sólo afecta a las Pitiüses y una modificación de las Directrices de Ordenación del Territorio «con la que ahora resulta que no está de acuerdo ni siquiera el PSOE de Eivissa, que votó a favor», denuncia el conseller popular.
Palau cree que aunque el informe del Consell Consultiu no sea vinculante, el Ejecutivo balear «le hará caso». «Sería el colmo que ignoraran sus advertencias», apostilló.