Muchos vecinos de las Pitiüses aseguran haber visto objetos voladores no identificados (ovnis). Algunos de estos casos no pasan de ser simples efectos meteorológicos o aviones que pasaban por nuestro cielo. En cambio otros sucesos no han obtenido, hasta el momento, una explicación racional. A continuación repasamos algunos de los casos más destacados, según la explicación del investigador y periodista Josep Riera, especializado en el tema.
El accidentado vuelo Mallorca-Las Palmas
Fecha: 23 horas del 11 de noviembre de 1979. Un avión de pasajeros parte del aeropuerto de Son Sant Joan con destino a Canarias. De pronto, el comandante del aparato descubre, justo cuando se encuentra encima del islote de es Vedrà, que le sigue un objeto volador no identificado. El platillo volante juega con el avión: se coloca delante, detrás, arriba... El piloto se ve obligado a tomar tierra en el aeropuerto valenciano de Manises para no poner en peligro a los pasajeros. El Ejército manda inmediatamente un caza a la zona, que también se enfrenta a las piruetas del ovni. Este es uno de los pocos casos en los que ha tomado cartas en el asunto el Ministerio de Defensa.
Una nave nodriza sobre Eivissa
Fecha: Julio de 1953. Durante varias tardes seguidas los vecinos de Eivissa pudieron ver algo similar a una gran nave nodriza sobre sus cabezas. El supuesto ovni estaba situado a 45 kilómetros de altura.
Una base submarina de ovnis en es Vedrà Varios investigadores creen que el islote de es Vedrà forma parte de un «triángulo de las Bermudas» mediterráneo, que haría las veces de base submarina para los ovnis. Además de haberse visto platillos saliendo del mar, los especialistas aseguran que allí se producen curiosos efectos electromagnéticos. Otro dato: las palomas se desorientan cuando lo sobrevuelan.
Luces sobre el islote de sa Conillera
Fecha: 1973. Una luz baja rápidamente hasta el faro de la isla de sa Conillera y lo mantiene apagado, para asombro de todos, durante un minuto y medio.
¿Paracaidistas con linternas?
Fecha: Febrero de 1979. Los tripulantes del barco butanero Tamames, que navegaba cerca de Formentera, se encontraron con 50 luces que se movían en todas direcciones a una velocidad endiablada. La explicación oficial fue todavía más disparatada: se trataba de un grupo de paracaidistas haciendo maniobras de salto con linternas en el mar durante la madrugada.
Extrañas bolas de fuego en Santa Eulària
Fecha: Julio de 1978. Los vecinos de Santa Eulària pudieron ver durante varias horas unas «extrañas bolas de fuego» sobre el mar. Hasta se pudo medir la distancia a la que se encontraban con un teodolito de 180 aumentos. Las luces desviaban las brújulas y una de ellas amerizó en el agua.
Un monje marciano en Santa Eulària
Fecha: 1978. Dos niños jugaban sobre un árbol en Santa Eulària cuando vieron a un hombre de más de dos metros vestido con una túnica blanca y con una estrella sobre el pecho que se hacía acompañar por un extraño robot. Cuando bajaron, una especie de huevo inmenso se llevó a este curioso personaje.
Un ovni aterriza en Sant Ferran
Fecha: Julio de 1980. Un platillo volante tomó tierra en un campo sembrado en la localidad de Sant Ferran, en Formentera. Al verlo, una mujer se desmayó. El ovni dejó su huella: dos grandes círculos quemados sobre el trigo.