El presidente de la Asociación de Comerciantes de Eivissa -que reúne a un porcentaje muy elevado del sector-, Francisco Ramón, considera que gracias a la zona azul los comercios van a tener «muchas y grandes ventajas». Ramón asegura que «cuando la gente llegue al centro de Eivissa va a tener donde poder aparcar, algo hasta ahora muy difícil, lo que suponía un agravio comparativo frente a otras zonas». El representante del comercio está convencido de que esta medida repercutirá directamente en el aumento de las ventas en los comercios, aunque también es consciente de que para los ciudadanos «va a resultar desagradable tener que pagar por aparcar».A pesar de las posibles desventajas, Ramón reitera que es una de las mejores soluciones posibles. Otra de las medidas que plantea es la de construir aparcamientos, que considera «imprescindibles». «Es una pena que cuando se hizo el parque de la Paz no se pensase en habilitar dos pisos de parking subterráneo». Lo que está claro, según Francisco Ramón, es que Eivissa «necesita un aumento urgente de plazas para estacionar».
Por su parte , el presidente de la Pimeef, Antoni Marqués, cree que lo mejor de la habilitación de zonas azules en Eivissa es que se haya planteado de manera experimental, durante un año. «Hay dar un plazo razonable para detectar posibles defectos y tener en cuenta la opinión de todos los sectores implicados: vecinos, comerciantes, transportistas, etc». Tarde o temprano, instalar zonas azules en Eivissa «será inevitable», augura Marqués, por lo que estar a prueba un año «va a dar una visión muy clara de los fallos». De todos modos, el presidente de la Pimeef cree que es un tema que hay que abordar con mucha cautela y mucha información.