El presidente del Govern de les Illes Balears, Francesc Antich, dijo ayer sentirse «preocupado» por como la postura de oposición a cualquier proyecto del gobierno autonómico que mantiene el PP balear puede estar influyendo en el Gobierno central. Antich dijo que lo que tienen que ser «relaciones institucionales normales» parece estar convirtiéndose en una firme «oposición desde el Gobierno que preside José María Aznar» y culpó de ello muy especialmente al ex-presidente del Govern y responsable del PP balear Jaume Matas.
El jefe del Ejecutivo autonómico puso como ejemplo la reunión que solicitó en el mes de noviembre el conseller d'Economia i Hisenda al ministro Rodrigo Rato para hablar de fondos europeos. Según Antich, dicho encuentro no se produjo porque Rato se disculpó señalando que estaba muy ocupado con los presupuestos generales. «Pero a los pocos días sí recibió a Matas», que fue quien anunció que inversiones llegarían a las Islas procedentes de fondos comunitarios.
«Me preocupa la postura del PP porque antes de que hagamos las cosas ya están mal», dijo Antich refiriéndose a las críticas que hizo Matas del anteproyecto de ley de consells insulars el mismo día en que se le entregó un borrador del texto. «Se tienen que adecuar al sitio en el que están que es la oposición», añadió. Además, el presidente volvió a arremeter firmemente contra Matas diciéndole «que representa a 28 diputados y no puede analizar temas tan serios con tan poca rigurosidad».