Unas 300 personas acudieron ayer hasta el Auditorio de Cas Serres para presenciar el festival «Musidanza 2000», un espectáculo protagonizado por la compañía del mismo nombre y que contó además para la ocasión con la colaboración de la Academia San Carlos.
En este sentido, profesores y responsables quisieron agradecer la participación de Esteban Santos y su grupo en una cita que puso a prueba su valía profesional y humana ya que la recaudación iba destinada íntegramente a Cáritas.
Más de 70 bailarinas desarrollaron un montaje dividido en dos actos en el transcurso de los cuales pudieron verse pasodobles, alegrías, suites o acordes actuales, interpretados por dúos y corales.
El baile español se convirtió en la estrella indiscutible de una tarde de danza que consiguió llenar el recinto cedido por el Consell y cuyos únicos incidentes pueden resumirse en una o dos peinetas en el suelo.
Las coreografías corrieron a cargo de Eva Palacios (directora también del acto), José de Vila y María José Ramos, guionistas que fueron también actores de algunos de los números realizados.
Una hora de talento y aproximadamente quince minutos de descanso fue el tiempo empleado para ejecutar las 17 entradas realizas a un escenario que rememoraba una típica plaza andaluza y que ha sido diseñada por los propios miembros de la compañía, al igual que el vestuario.