Una de las playas con peor prensa de la ciudad de Eivissa, la de Figueretes, se sometió ayer a una profunda limpieza de sus fondos marinos. La Asociación de Vecinos del barrio, en colaboración con el Ayuntamiento y junto al grupo de buceadores de la Cruz Roja de Eivissa, se encargaron desde las diez y media de la mañana de eliminar todos aquellos elementos ajenos a este hábitat. Tan ajenos como pueden ser un carrito de la compra de los supermercados, tuberías inservibles o varios colchones, que fueron las piezas más visibles que se sacaron a flote.
Hasta la una y media, un grupo de 30 personas trabajó a fondo para que la zona recuperara parte de su aspecto original. Tras el esfuerzo, se les invitó a todos a una gran paella.