La asociación de residentes senegaleses de Eivissa y Formentera emitió ayer un comunicado de prensa para responder a las críticas que en las últimas semanas se han producido por la dedicación de este colectivo a la venta ambulante, que los empresarios locales consideran muy negativa para sus intereses. Esta asociación recuerda en su escrito que quienes se dedican a esta actividad tienen «un permiso de trabajo» que les da derecho a ejercer esa ocupación. «Pagamos los impuestos correspondientes y las cotizaciones a la Seguridad Social, ya que de eso depende cada renovación», argumentan.
Este colectivo explica que están agradecidos de poder estar en España y recuerdan que si se encuentran aquí es por unas circunstancias económicas por todos conocidas. «No nos queda más remedio que buscar la vida y el futuro para nosotros, nuestras mujeres e hijos».
Esta asociación señala también que están dispuestos a reunirse con todas las partes implicadas en el problema de la venta ambulante para solucionar el que ellos también consideran el problema más importante: el de los espacios donde ejercer su actividad. Sin embargo, también añaden que los turistas a los que ellos se dirigen para vender sus productos no han mostrado nunca su malestar por el ofrecimiento que se les hace para que adquieran objetos de diverso tipo.