El conseller de Treball, Eberhard Grosske, acudió ayer a Eivissa para participar en la mesa del Pacte per a l'Ocupació, visita que aprovechó para poner sobre la mesa los datos de siniestralidad laboral en Eivissa, que calificó de «preocupantes».
Así, de enero a agosto de 2000 se han registrado un total de 2.184 accidentes, de los que cuatro han sido mortales, 24 graves y 2.156 leves. El número de siniestros ha aumentado en 346 con respecto al mismo período de 1999 , cuando se registraron 1.911 accidentes y en 724 en relación a 1998, cuando las cifras de percances relacionados con la actividad laboral alcanzaron los 1.533 siniestros.
La falta de información, formación y de conocimiento de medidas de prevención, unida a las especiales características del mercado laboral de las Pitiüses son las causas que apuntó ayer Grosske como motivos de las elevadas cifras de siniestralidad en Eivissa y Formentera. «Es una prioridad del Govern reducir estas cifras», señaló el conseller, que añadió que hay un plan de choque contra la siniestralidad que «está en vías de desarrollo» y que prevé un incremento de la plantilla dedicada a la prevención de riesgos, sobre todo en hostelería y construcción.
Durante la semana pasada los técnicos de prevención de la Conselleria se desplazaron a Eivissa para visitar las 70 empresas con más porcentaje de siniestralidad y «detectar aquellos errores que se pueden subsanar», señaló Grosske.