Joan Marí Serra, portavoz del grupo municipal progresista de Sant Antoni, considera que el año 2000 ha pasado prácticamente en blanco para el municipio. Así, asegura que «en obras no se ha hecho nada, sólo el día a día».
El concejal del Pacte Progressista recuerda que de las inversiones previstas para el año 2000, pocas se han llevado a cabo: «Había que poner césped en el campo municipal, había que construir más pistas deportivas, había que iniciar las obras para la estación de autobuses, había que hacer una serie de instalaciones en ses Païsses... Pero no se ha hecho nada», señala Marí Serra. Los progresistas consideran que el equipo de Gobierno debe diseñar unos presupuestos para 2001 que incluyan inversiones en instalaciones deportivas, equipamientos para los barrios, alumbrado, saneamiento y, especialmente, en una mejora de los servicios de limpieza y de la seguridad ciudadana.
En Democràcia Pitiusa también inciden en que en 2000 «se han esfumado» las cinco propuestas que esta formación obligó a incluir en los presupuestos como requisito para dar su visto bueno a las cuentas del equipo de Gobierno. Esas propuestas sumaban 77 millones de pesetas, que se debían destinar al arreglo de la calle Goya, a elaborar el proyecto de la piscina de Can Coix y del Polideportivo municipal (15 millones), a reformar el camino de Can Guillamó (20 millones), a redactar el proyecto para arreglar las calles Retiro, es Pi, Bellavista, es Molí y Ametllers (10 millones), a realizar el drenaje y la instalación de césped en el campo de fútbol (12 millones) y para elaborar el estudio para la rehabilitación del casco histórico del municipio.