El Ayuntamiento de Sant Antoni adjudicó ayer a la empresa Necso las obras de construcción de la piscina de Can Coix, un paso administrativo que se alargaba desde hacía meses y que supondrá que el municipio disfrute a principios de 2002 de las instalaciones de ese tipo más modernas e innovadoras de la isla. La piscina costará 393 millones de pesetas, alrededor de 100 millones más que el presupuesto original. Necso fue la única empresa que se presentó al concurso, pero puso una condición: debía aumentarse el presupuesto hasta 393 millones y, además, debían eliminarse varios elementos que encarecían el proyecto.
Finalmente, el Consistorio ha logrado que Necso retome algunos de los elementos que consideraba prescindibles y que, a juicio de la empresa, suponían un encarecimiento del producto. El propio alcalde, Antoni Marí Tur, viajó a Palma para entrevistarse con los responsables de la empresa e intentar que aceptaran la inclusión en el proyecto del vaso de acero inoxidable de la piscina, que Necso pretendía construir a base de hormigón armado con revestimiento de gresite antideslizante. Según explicó el alcalde, con hormigón siempre se producen fugas de agua, algo que es difícil que ocurra con el acero inoxidable.
Necso también aceptó que la cubierta fuera de madera, pero no ha incluido en el proyecto detalles como el solarium, si bien la obra final quedará acondicionada de tal modo que esa instalación podrá construirse cuando el Consistorio así lo decida. Pacte y Democràcia Pitiusa apoyaron la adjudicación de estas obras.