El conseller del Partido Popular Pere Palau acusó ayer al equipo de gobierno del Consell Insular -del Pacte Progressista- de querer «intervenir en los gobiernos municipales donde las urnas no les han dado responsabilidades». Palau cree que el consorcio de servicios municipales que quiere constituir el Consell influye notablemente en la capacidad de decisión de las instituciones municipales y afirma que el Pacte lo que quiere es que los alcaldes tengan que estar «siempre pendientes de este tipo de consorcios».
Según el PP, el verdadero problema es que la institución insular no siente el suficiente «respeto a la autonomía municipal». Palau no se mostró en contra del consorcio que promueve el Consell, pero estimó que tienen que ser los ayuntamientos los que decidan si quieren sumarse a él. «Y si no quieren hacerlo, no se les puede intentar castigar», añadió.
Desde la oposición se argumenta también que los consistorios gobernados por el PP están siendo discriminados por el Consell Insular, como se demuestra «por la muy escasa colaboración que existe con ellos». Según Palau, existe incluso una consigna dentro del Pacte para que no se preste ayuda a estas instituciones. «Y si no es así, que lo demuestren con hechos», pidió el conseller popular, que puso como ejemplo el hecho de que se hubieran rechazado todas las mociones que el PP presentó a los presupuestos del Consell para conseguir que se descentralizara la inversión por municipios. «Lo que tienen que hacer es llevar a cabo con ellos más reuniones, plantearles propuestas positivas y hacer con ellos lo que hacen con otros ayuntamientos», exigió el portavoz popular.
Palau cree que las críticas del conseller Vicent Tur sobre la obstrucción que llevan a cabo los consistorios populares «no se ajustan a la realidad» y afirmó que si no se ha vuelto a presentar el consorcio ante el pleno del Consell es porque no se ha conseguido llegar a un acuerdo con las entidades locales.