Amics de la Terra y el GEN se han unido para exigir al presidente de la Autoritat Portuària, Francesc Triay, que antes de proceder con las obras de dragado y el vertido de los fangos extraídos del fondo marino del área de es Botafoc, encargue una evaluación de Impacto Ambiental.
Los ecologistas consideran «imprescindible» que se realice un análisis químico del material de los sedimentos a dragar que «podrían contener cantidades estimables de metales pesados considerados muy peligrosos y contaminantes». El estudio debe contener también, a juicio de los ecologistas, un análisis del estado y ubicación de la praderas de Posidonia existentes, el efecto de las partículas en suspensión, nutrientes, metales pesados, PH y transparencia.
Los ecologistas aseguran que las declaraciones hechas públicas por la Autoritat Portuària, en las que señalaba que no era necesario un proceso reglado de Evaluación de Impacto Ambiental para el proyecto de dragado del material «porque el material sería utilizado en su totalidad en obras de infraestructuras portuarias» no tienen validez en este caso «ya que los fangos no irán a ningún puerto sino a un lugar de la costa».
El dragado de los fondos marinos en el área en donde se prevé construir el dique de es Botafoc y el vertido de 200.000 m3 de los fangos extraídos en una zona de la costa de Eivissa y Formentera «podrían causar importantes impactos negativos a los fondos marinos, costas, playas y, en consecuencia, dañar las praderas de posidonia oceánica, afectar a las aves marinas, los recursos pesqueros y las actividades turísticas». Además piden que la evaluación de impacto ambiental cumpla los trámites de información pública y que se remita a la comisión balear de medio ambiente para su análisis.