El accidente que sufrió Jade, hija del popular cantante de los Rolling Stones Mick Jagger, el pasado mes de diciembre en la carretera de Eivissa a Portinatx tras salirse de una curva e impactar con un camión, no le ha dejado secuelas. El incidente ocurrió cuando Jade Jagger llevaba a sus hijas al colegio. Su vehículo, un Chevrolet todoterreno, no respondió y se salió de la trazada en una de las curvas de esa carretera. La más pequeña de sus retoños, de cinco años, sufrió una fractura en la pierna y tanto la mayor, de nueve, como la propia Jade presentaron heridas leves.
Estos daños se han pasado y la modelo e hija de Mick Jagger vuelve a su lugar de origen: las pasarelas. El Salón Gaudí de Barcelona lo ha comprobado. Jade, de 29 años, desfiló con los modelos de diseñadores españoles, como los de la firma TCN. La Ciudad Condal acoge durante esta semana la presentación de la colección de invierno 2002 y los responsables del Salón Gaudí han querido contar con la modelo residente en Eivissa.
El seguimiento que se efectúa a la joven desde Gran Bretaña motivó que al sufrir el accidente éste fuera portada de las publicaciones del corazón de aquel país. Quizás ese seguimiento fue lo que motivó su traslado hace unos años a Eivissa, donde reside en el término municipal de Sant Joan de Labritja. Y no sale del país, ya que Barcelona ha sido la ciudad elegida por ella para retornar a su rutina profesional.
Los vestidos que protagonizarán la moda en el invierno de 2002 se han convertido en el pretexto para la reaparición de la hija de Mick Jagger en la pasarela del Salón Gaudí de Barcelona. Una mejoría notable.