El acuífero de Can Basora, que aporta el 37 por ciento del agua que se bebe en Santa Eulària, quedará seco el próximo mes de diciembre si continúa la sequía y la extracción se mantiene en los niveles actuales. Esta es una de las conclusiones a las que se llega en un informe elaborado por la Sociedad de Gestión de Servicios Urbanos (Sogesur) a petición del alcalde de Santa Eulària, Vicent Guasch.
En el informe se dibuja un desolador panorama de los pozos de Santa Eulària que gestiona la empresa. Durante el último año, casi todos han experimentado alarmantes descensos del nivel de agua: en el pozo de Can Basora, el descenso del nivel dinámico ha sido de 22'81 metros desde diciembre de 1999 hasta el mismo mes de 2000; en idéntico periodo, el pozo de Can Llaurador ha bajado 7'85 metros, mientras que los denominados Sala I, Sala II y Sala III tienen 10'13 metros, 8'12 metros y 5'10 metros menos de agua, respectivamente.
Otra de las conclusiones del informe es que prácticamente en todos los casos el volumen de extracción anual «se sitúa por encima del autorizado por la Dirección General de Recursos Hídricos». Por ejemplo, en Can Llaurador está permitido extraer 131.400 metros cúbicos, pero en 2000 se sacaron de ese acuífero 20.000 metros cúbicos más de los autorizados: en Can Basora se extrajeron 366.027, cuando está permitido sólo 250.000 metros cúbicos. En el pozo Sala I, la extracción alcanzó los 319.128 metros cúbicos, cuando el límite es de 115.000 metros cúbicos. Sólo en el Sala II se absorbió la mitad de lo autorizado. En total, durante el pasado año se sacó de esos acuíferos 273.080 metros cúbicos más de agua de lo permitido. Tanto el pozo de Can Basora como el de Can Llaurador son de propiedad municipal, mientras que en los restantes la captación se hace en la propiedad de un particular.
Otra de las advertencias del informe es que, «en casi todos los casos, el nivel dinámico actual se sitúa por debajo de la cota de la boca del pozo, lo que significa que se halla por debajo del nivel freático». Esto puede provocar la inminente salinización de los acuíferos de Santa Eulària. En Can Llaurador, la intrusión marina puede producirse a principios de 2002; en Can Basora, en diciembre de 2001; el pozo Sala I «estará agotado a finales de 2003» y «presenta una elevada concentración de sulfatos», cuya tendencia es al alza; el Sala II «presentará serios problemas a mitades del año 2002» y la concentración de sulfatos «está empezando a ser excesivamente alta», se advierte en el informe.