El polifacético artista Javier Mariscal confesó haberse sentido «emocionado en el momento en que llamaron desde Formentera para pedirme que diseñara un reloj para la isla». Estas declaraciones las realizó ayer tras haberse reunido en el Consistorio con el alcalde Isidor Torres, la consellera de Cultura, Fanny Tur, el conseller para los asuntos de Formentera, Santiago Ferrer, y Paquita Serra e Isidor Costa, los dos portavoces de Temps al temps, asociación creada a principios de año con la finalidad de conseguir que la isla tenga su primer reloj público.
Como explicó Paquita Serra, «después de dos años en que las fiestas tanto de Navidad como de fin de año han tenido gran éxito, se echaba en falta un reloj que diera las famosas campanadas, especialmente este año en que por culpa del tiempo el fin de año se celebró a mitades de enero».
Paralelamente a esta propuesta se desarrolló en el seno de esta asociación la idea de ligar el reloj con un parque público infantil en los alrededores de la iglesia. Tanto Serra como Costa insistieron en que no está definida la ubicación final de dicho parque infantil, y expusieron a los representantes insulares y municipales su proyecto que, en palabras del alcalde «es una propuesta muy sensata que liga perfectamente con nuestro proyecto de comprar este mismo año un solar para un parque infantil en Sant Francesc Xavier». En términos parecidos se pronunció el conseller Santiago Ferrer.
A partir de ahora habrá que decidir la ubicación final del parque infantil y el reloj. Y cuando el solar esté claro, Javier Mariscal elaborará un proyecto conjunto.