La compañía GESA no podrá poner en funcionamiento sus dos nuevos grupos generadores hasta mediados de julio, medio mes después de lo inicialmente previsto. Ese retraso ha sido motivado por imponderables en el suministro del material que se precisa para la instalación, según explicó el director de la central de Eivissa, José Luis Gracia. No obstante, para recuperar el tiempo perdido «se está haciendo un esfuerzo muy grande» por parte de los técnicos, dijo Gracia.
Debido al peso de los motores, de 267 toneladas cada uno, durante los últimos días se han tenido que emplear dos grúas para poder colocarlos dentro de una de las naves de GESA. Cada grupo, que funciona con diesel y que también está preparado para operar con gas natural, tiene 18.000 kW de potencia. Los motores se encuentran, todavía, literalmente empaquetados en plásticos.
Por otra parte, Gracia explicó que GESA no ha rebajado aún el pronóstico de crecimiento de la demanda energética para 2001, pese a los anuncios de un significativo descenso del turismo. En marzo, la compañía cifró en torno al seis por ciento el aumento para este año. El crecimiento experimentado en 2000 fue del 7'2 por ciento, un cuatro por ciento inferior al producido durante el año 1999.
Un paso más para concretar el gasoducto
submarino
El Govern balear ha hecho pública la licitación del contrato de
consultoría y asistencia para la elaboración del proyecto de diseño
preliminar del gasoducto submarino que debe unir la península con
Eivissa y Mallorca. El plazo de ejecución será de tres meses y el
presupuesto base es de 70 millones de pesetas. La fecha límite de
presentación del proyecto será el 22 de junio. El gasoducto entrará
en Eivissa por Cala Gració, en Sant Antoni, junto a la desaladora
de la localidad.