Los vecinos de la avenida Vuit d'Agost entregaron ayer en el Ayuntamiento de Eivissa y en la Conselleria insular de Medi Ambient 1.100 firmas en protesta por las continuas molestias que provoca la depuradora de Eivissa, foco de un olor nauseabundo permanente y que incluso ha sido puesta en entredicho por el propio Instituto Balear de Saneamiento (Ibasan) en un estudio debido a los problemas de salud laboral que genera.
La entrega en el Ayuntamiento se hizo con luz y taquígrafos, para que nadie de la institución local pudiera volver a alegar que las firmas se habían perdido, tal como ocurrió recientemente. Por su parte, la consellera de Medi Ambient, Fanny Tur, prometió a los vecinos que hará entrega de las rúbricas a su homóloga balear. Los vecinos aducen que la depuradora les provoca molestias y daños en la salud, mientras que los comerciantes alegan «graves pérdidas económicas».
Por otra parte, la Autoritat Portuària anunció ayer que permitirá al Ibasan trasladar la problemática estación de bombeo de Talamanca tras el verano. También desmintió que los vertidos en la zona sean provocados por las obras del dique de es Botafoc. El Ibasan asegura que son ocasionados por dos circunstancias: el paso de camiones y el bloqueo de uno de los aliviaderos. El Ayuntamiento también culpó ayer a esa estación de bombeo del vertido producido el martes en las cercanías de la depuradora: cada vez que se para, afloran las aguas residuales, que ayer se retiraron.