U n lazo gris en la solapa. Este fue el gesto más repetido durante la mañana de ayer en las mesas que, con motivo de la celebración del Día Mundial del Alzheimer, se instalaron en Eivissa, Sant Antoni de Portmany y Santa Eulària des Riu. Los ciudadanos recibieron información sobre la enfermedad degenerativa que afecta a la memoria y pudieron efectuar donativos en metálico.
En 1995 eran 1.600 las personas afectadas por el Alzheimer en las Pitiüses. Hoy probablemente el número haya aumentado y las organizaciones requieren fondos para ayudar tanto a los enfermos como a los familiares que sufren el impacto psicológico de convivir con un allegado que no se acuerda de su nombre. La recaudación obtenida ayer se conocerá en los próximos días. Por colaborar, los voluntarios que custodiaron las mesas colocaron en la solapa de los donantes un lazo gris.
Folletos, pegatinas, carteles y folios en los que plasmar un firma de apoyo ocuparon la superficie de las mesas para que la desinformación, por lo menos ayer, no fuera un obstáculo para asumir la presencia de una enfermedad como el Alzheimer. El tiempo acompañó y la gente se acercó a las mesas.