El gerente de Can Misses, Ignacio Rodríguez, acompañado por los médicos de radiología del hospital, presentó ayer el nuevo aparato de TAC con el que cuenta el centro, un sistema de «tecnología punta» en el que el Insalud «ha invertido 62 millones más otros 7 en mejora de instalaciones» de cableado informático. El sistema permite realizar un reconocimiento de una zona corporal como el tórax y pulmones en quince segundos, mientras que el aparato antiguo necesitaba media hora para realizar una exploración similar.
Las ventajas del sistema no se quedan ahí. Al estar totalmente informatizado permite incluso enviar el resultado a otro hospital o especialista para que emita su diagnóstico, que se contrasta con el que han realizado los radiólogos del centro hospitalario. Otra de las ventajas del sistema es que reduce de manera drástica la emisión de radiación al paciente durante la exploración. El aparato cuenta con un sistema que se autorregula, de manera que siempre emite el menor porcentaje de radiación con el que pueda trabajar.
El TAC está conectado informáticamente con unos ordenadores en los que aparece el resultado de la exploración en tres dimensiones. El radiólogo que se ocupe del caso puede manipular la imagen de la forma que mejor le permita trabajar con ella e incluso le es posible enviar el resultado al ordenadora que tenga en su casa para avanzar en su diagnóstico. El TAC está preparado para hacer exploraciones de cuerpo entero empezando por la neurología, con estudios de cráneo; de tórax y de abdomen y de patologías óseas de extremidades.
Los radiólogos que van a trabajar directamente con el sistema, Félix García, Francisco Cuesta y Eva Alonso, mostraron durante la presentación oficial del aparato su satisfacción por poder contar en el centro con un aparato de última tecnología aunque reconocieron que su trabajo va a aumentar considerablemente, aunque siempre en beneficio del paciente.