Saquemos a la calle todo nuestro ingenio y critiquemos las cosas que no nos agradan, ridiculicemos a nuestros vecinos, parodiemos las situaciones más cómicas... divirtámonos sobre todo». El Carnestoltes del Carnaval de Eivissa incluyó estas palabras en la lectura del pregón que abrió ayer por la tarde las fiestas. Un pretexto para vestir la tarde de alegorías y marcar un ritmo exigente desde el primer día de celebración. La velada culminó con el tradicional concurso de mariol·los, que dio paso a la actuación de la orquesta Tropical. La gente se sumó a la cita conforme ésta ganó en intensidad según la noche se hizo cerrada.
Uno de los laterales del Paseo Vara de Rey fue el punto del primer día de Carnaval en Eivissa. Desde allí partió la comitiva que se dirigió hasta el puerto para recoger al Carnestoltes a ritmo de batucada caribeña. El grupo iba ataviado con trajes amarillos y rojos , tonalidades vivas apropiadas para el tono festivo de la jornada. El público acudió a la convocatoria vestido con disfraces muy dispares, aunque no todos dieron el paso de cambiar la cara por un día y algunos prefirieron ver la fiesta en calidad de curiosos.
La Policía Local escoltó a la comitiva festiva a lo largo de todo el recorrido. Los componentes del grupo caribeño se detuvieron en el puerto para captar la presencia de dos gigantescas marionetas y la del propio Carnestoltes, quien se sumó a la fiesta sin ningún inconveniente. El trayecto sirvió para que los despistados que desconocían el inicio del Carnaval se animaran a participar en el pasacalles que recogió a cada metro a más personas. Al igual que se acumulaba la gente en la calle lo mismo ocurrió con los vehículos que circulaban en ese momento por las vías que fueron blanco del recorrido.
Los conductores se tuvieron que armar de paciencia hasta que la comitiva al completo pasó delante de sus ojos. Al llegar de nuevo a Vara de Rey el escenario de la carpa municipal acogió la presencia del Carnestoltes -con el pelo largo pelirrojo, una blusa blanca y un sombrero negro de grandes dimensiones-, quien procedió a la lectura del pregón. El contenido del mismo finalizó con el siguiente mensaje: «Un año más me complace ser vuestro anfitrión en esta fiesta de los excesos. Os espero a todos en la gran fiesta que hoy -por ayer- comienza».
El público puso el mismo entusiasmo en sus aplausos que el protagonista había plasmado en la lectura del texto. Sin tiempo para el respiro, el lugar fue tomado por los sonidos del grupo Tropical, que amplió con sus canciones el sabor caribeño de la tarde y añadió otros temas populares para que el auditorio allí presente sobrellevara mejor la hora de espera hasta el inicio del concurso de mariol·los.
A las ocho en punto comenzó el tan esperado como tradicional concurso de disfraces de andar por casa y, una vez finalizado, la fiesta continuó con la misma orquesta caribeña. Cuando la música desapareció del lugar con ella se fueron poco a poco los participantes, el público en general y los agentes que velaron por la seguridad de todos. En el lugar se vieron disfraces para todos los gustos: payeses, piratas, monjas, princesas, vaqueros, protagonistas de películas de terror... cualquier pretexto fue bueno para sumarse al primer día de Carnaval ibicenco. Durante la jornada de hoy no habrá actos incluidos en el programa de fiestas, ya que habrá que reservar las fuerzas para mañana, cita central del Carnaval 2002 con la Rúa que se concentrará a las 18'30 horas en la Avenida de Santa Eulària.
Más de 1.400 personas inscritas para la Rúa de mañana
Las cifras facilitadas por el Ayuntamiento de Eivissa en la tarde de ayer indican que hay más de 1.400 personas inscritas para participar en la Rúa de Carnaval que partirá mañana desde la Avenida de Santa Eulària a las 19'30 horas. Las carrozas que desfilarán suman el número de 37. Entre todos se repartirán los 21 premios dotados con más de 10.000 euros. En otro punto de la isla, en Cala de Bou, la asociación de vecinos organizará mañana en su sede a las 17 horas una gran fiesta familiar de disfraces.