El presidente del Parlament, Maximilià Morales, aprovechó ayer el acto institucional para conmemorar el aniversario del Estatut para reclamar la reforma de la Constitución con el fin de convertir el Senado en una auténtica cámara territorial. Con esta modificación, según Morales, se harán posibles «las legítimas aspiraciones de los ciudadanos de las comunidades autónomas», aunque el presidente de la Cámara también aclaró que «en la Constitución caben todos los españoles». El presidente de la Cámara balear argumentó durante su discurso institucional que «la Constitución no es intocable». «Me atrevería a decir que la conveniencia de las reformas que necesita deriva, precisamente, de la urgencia de mantener aquella determinación inicial de que todos y cada uno de los ciudadanos tienen cabida», planteó.
En opinión del presidente de la Cámara, la reforma de la Constitución debe producirse para cambiar el funcionamiento del Senado. «La reforma del Senado "defendió" debe constituir el eje en torno al cual se articule el ejercicio de nuestros derechos como pueblo». Morales sostiene que, cuando se aprobó la Constitución, el título octavo tan sólo era un proyecto y el mapa de las autonomías, una incógnita. «Euskadi y Catalunya eran una excepción, pero las comunidades autónomas no existían. Hoy son una realidad que funciona y que han llegado a la mayoría de edad, a pesar de las tutelas que se han intentado mantener», dijo.
Morales entiende que la «Cámara de las autonomías, el fórum territorial por antonomasia, no se ha adaptado a la transformación que ha experimentado la realidad política del Estado». «El Senado "añadió" continúa teniendo la misma configuración que cuando ni tan sólo se sabía cuál sería el resultado del desarrollo autonómico». En opinión del presidente del Parlament, el Senado es una cámara «vacía de contenido, pero rica en expectativas y posibilidades para convertirse en el auténtico fórum de diálogo territorial y en la clave del arco de desarrollo autonómico del Estado». Morales criticó el hecho que el Senado sea, en estos momentos, una cámara de segunda lectura que reproduce, de una manera cómoda, las mayorías del Congreso de los Diputados. «Redundancia que, por sí misma, ya hace dudosa la utilidad política que tiene», subrayó.
Morales aprovechó sus referencias a la Constitución para recordar que, a pesar de los tres recursos presentados por el Gobierno central contra leyes aprobadas por el Parlament, en todos los casos el Tribunal había dado la razón a las tesis defendidas por Balears. El presidente de la Cámara balear reivindicó durante su discurso la presencia de las comunidades autónomas en las instituciones europeas. Morales defiende que la Constitución no impide que las autonómias incluyan a los miembros en la Unión Europea que determine el Gobierno central.
«El vigésimo aniversario debe celebrarse con la
aprobación de los 'síndics'»
El presidente del
Parlament reclamó que el Estatut celebre el próximo año su vigésimo
aniversario con la elección del Síndic de Greuges y de los miembros
de la Sindicatura de Comptes, dos figuras institucionales que aún
no son una realidad por la incapacidad de las fuerzas políticas
para consensuar los nombramientos. «Que la presencia del Síndic de
Greuges y de los miembros de la Sindicatura de Comptes en el acto
de celebración del vigésimo aniversario del Estatut sea el mejor
testimonio de su salud democrática y de la culminación del edificio
estatutario», señaló Morales, quien reconoció el esfuerzo de los
grupos para aprobar el Consell Consultiu. El portavoz del PP, José
María González Ortea, aseguró que Morales «dice una cosa y hace
otra, y lo vimos claramente en el último debate».