El presidente del Govern balear, Francesc Antich, aseguró ayer que la derrota de la presidenta del Consell de las Pitiüses, Pilar Costa i Serra, en la cuestión de confianza a la que se sometió el pasado jueves «no ha cambiado nada» en cuanto a la estabilidad del «Pacto de Progreso» en el Ejecutivo y en el Parlament de les Illes Balears. En la rueda de prensa posterior al Consell de Govern de cada viernes, Francesc Antich señaló que el voto en contra del diputado Joan Buades y del grupo popular a la cuestión de confianza ligada a los presupuestos «ha consolidado una situación que ya se conocía».
«Hay un gobierno en minoría -añadió- y no hay alternativa a ese gobierno», indicó el presidente, para quien el ejecutivo insular pitiuso deberá ahora «seguir trabajando» para sacar adelante cada uno de sus proyectos. Para Antich, lo relevante es que, si no se presenta una moción de censura por parte del PP y Joan Buades, se aprobarán automáticamente los presupuestos del Consell para este año, que «son una herramienta fundamental para cualquier institución».
Respecto a las posibles consecuencias de esta situación para el «Pacto de Progreso» autonómico, el presidente del Govern recordó que desde que Buades está fuera del gobierno pitiuso «no ha habido ningún problema en el Parlament» y Els Verds de Mallorca han seguido trabajando en el seno del Ejecutivo, con la verde Margalida Rosselló al frente de la Conselleria de Medi Ambient. Por su parte, la consellera de Medi Ambient balear, la verde Margalida Rosselló, aseguró que respeta la decisión de Joan Buades, pero resaltó que «no tiene por qué repercutir» en el Govern. La consellera señaló que aunque lo ocurrido «no es políticamente agradable», es consecuencia de «una dinámica que estaba clara desde hace tiempo».