Los hoteleros de las Pitiüses cerraron ayer filas para proclamar su «no» más absoluto a la implantación del impuesto turístico que entra en vigor a partir del 1 de mayo. Cerca de 300 hoteleros de Eivissa y Formentera se reunieron en una asamblea general extraordinaria, una de las más numerosas, para acordar el reintegro a los turistas del importe de la ecotasa en los servicios que utilicen de los establecimientos (como la consumición en el bar del hotel), así como organizar la defensa colectiva de los derechos de los turistas como contribuyentes. La medida supondrá «un sacrificio económico» para el sector.
Como ejemplo, un hotel de tres estrellas, de 300 plazas y ocupación de un 80 por ciento, dejará de percibir 44.000 euros en temporada. De este modo, tratan de enviar un mensaje positivo al mercado: los turistas que vengan a Balears serán compensados. «No serán atracados legalmente», dijo el presidente de la Federación Empresarial Hotelera, Joan Bufí. Otra de las consecuencias de esta medida de compensación, según los hoteleros, es «impedir que se discrimine a los clientes respecto a la numerosa oferta ilegal», además de agruparlos «para que puedan reclamar efectivamente contra el impuesto».
Bufí dijo que esta medida supondrá un «sacrificio» para el sector: «Los hoteleros somos los que hacemos el sacrificio de compensar al cliente en estas cantidades y por eso demandamos unos derechos de los clientes que nos cedan para que se pueda reclamar en un futuro», dijo ante la petición de apoyo a los turistas. Respecto a su decisión de cobrar la ecotasa para que después descuente, los hoteleros afirmaron: «No podemos dejar de cumplir la ley». El secretario de la Federación, Pedro Matutes, por su parte, dejó ayer muy claro la postura de los hoteleros: «Estamos en contra de la ecotasa y, por tanto, asumimos una obligación que no es nuestra, sino del Govern, de devolverle el dinero de manera anticipada, antes de que el Tribunal Constitucional decida si hay que hacerlo o no». La Federación Empresarial Hotelera presentará un recurso conjunto ante el Constitucional.
Los empresarios hoteleros expresaron, además, su malestar por la actitud del Govern balear. «En dos años se han tenido dos reuniones que no han servido para nada, sólo para hacer el paripé», dijo Bufí. Respecto a las infraestructuras de Eivissa, tampoco son muy optimistas: «Miren cómo están las playas. No se puede hacer nada porque parece que todo está prohibido. Si no hay un cambio de actitud e interés, la imagen de la islas va a peor».
Perspectivas poco halagüeñas para este comienzo de
temporada
El «canje» del coste de la ecotasa , un euro por adulto, para
contar con el respaldo de los turistas al impuesto turístico cuenta
con el beneplácito de las agencias de viaje y de los
touroperadores, según aseguró ayer el presidente de la Federación
Empresarial Hotelera, Joan Bufí: «Un 95 por ciento de las agencias
de viaje están de acuerdo y los touroperadores más importantes ven
una vía abierta, muy factible».